Desmontando los mitos más comunes sobre el alcohol: ¡Comprender la embriaguez!

¿Cuántas veces has escuchado que “el alcohol no engorda”, “no hay que beber en exceso”, “es mejor tomar una copa que un refresco”, y otras frases similares? Probablemente demasiadas veces, y lamentablemente muchas de estas ideas son mitos sobre el alcohol. Por ello, es necesario abrir un debate sincero y profundo para desmontar estos mitos y comprender la embriaguez desde una perspectiva científica y adecuada. Investigamos la verdad tras algunos de los mitos más comunes sobre el alcohol, para conocer los hechos y no ser víctimas de la información errónea que desvirtúa su consumo responsable. ¡Acompáñanos en esta aventura!

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Existe una gran cantidad de mitos sobre el alcohol que circulan por el mundo. Si bien es cierto que el alcohol es una parte importante de la vida social, hay que entender cómo afecta nuestro organismo para poder tomar decisiones saludables. Por ello, a continuación vamos a desmontar los mitos más comunes sobre el alcohol y comprender la embriaguez.

¿Cómo afecta el alcohol al organismo?

Básicamente, el alcohol es metabolizado por el hígado en una sustancia llamada acetaldehído, la cual es tóxica para nuestro cuerpo. Una vez que entra en contacto con el torrente sanguíneo, comienza a afectar el sistema nervioso central, provocando los efectos típicos del alcoholismo: desinhibición, reducción del tiempo de reacción, somnolencia, y en casos extremos, unconsciousness. Cada una de estas manifestaciones dependen de la cantidad de alcohol ingerido.

Beneficios y riesgos de la ingesta de alcohol

Ingerir alcohol puede tener algunos beneficios, como relajar el cuerpo, disminuir el estrés o provocar una sensación de alegría. Por otro lado, también hay varios riesgos asociados a la ingesta de alcohol, como el alcoholismo, la dependencia, el daño hepático o el cáncer. Por lo tanto, es importante entender los límites de la ingesta para evitar estos riesgos.

¿Cuál es el límite de la embriaguez?

La embriaguez es un estado de alteración temporal del comportamiento y de la consciencia, provocado por la ingesta de alcohol. Dicho estado depende de la cantidad ingerida y de la persona que lo consume. Un adulto sano, sin problemas hepáticos ni previos, puede mantener un nivel de embriaguez bajo ingiriendo hasta 1.5 UBE, que equivale a una copa de vino, una caña de cerveza, o un vaso de destilado por hora. Sin embargo, esta cantidad varía según la tolerancia, el peso y el género de la persona que lo consume.

Efectos del alcohol en la salud mental

El uso excesivo de alcohol también puede causar efectos nocivos en la salud mental. El alcohol es un depresor del sistema nervioso central, lo que significa que reduce la habilidad de los neurotransmisores para comunicarse entre sí. Esto puede causar ansiedad, depresión, trastornos del sueño, problemas de memoria, desórdenes alimenticios o pérdida del control emocional.

Diferencia entre el alcoholismo y el abuso del alcohol

Alcoholismo es un término usado para describir a aquellas personas que tienen una dependencia física y psicológica al alcohol. Se debe a la progresiva tolerancia a este, que provoca que la persona necesite cada vez más alcohol para experimentar los mismos efectos. Por su parte, el abuso del alcohol es un comportamiento problemático, en donde la persona bebe en exceso y se encuentra en riesgo de desarrollar una dependencia al alcohol.

En conclusión, el alcohol puede tener ciertos beneficios, pero también puede causar mucho daño si se abusa de él. Por eso es importante entender los riesgos asociados a la embriaguez para tomar decisiones conscientes al respecto.

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